Regularmente los seres humanos tenemos a alguien que admirar, y creo que gran parte del éxito de una relación en pareja es la capacidad de admirar a tu compañera, para aprender de algún maestro es más fácil si lo admiras etc.
Casi siempre admiramos a alguien mayor que nosotros, pero debo confesar que hay un caso de admiracón que tengo hacia alguien 16 años mas chico que yo.
Admiro a mi sobrino Héctor, admiro su madurez e inteligencia, admiro la responsabilidad con la que hace las cosas y más admiro que hace todo esto sin dejar de portarse como un chamaco de su edad. Tiene la inteligencia para tratar niños y me refiero no solo a jugar con ellos, sino que cuando un niño está "emberrinchado" sabe como manejar la situación.
Admiro su nobleza pues es capaz de sacrificar un gusto suyo para compartirlo con alguien más, no es egoista, al contrario. Admiro también que su nobleza no lo lleva a ser alguien debil de desición, al contrario, cuando quiere algo, lo pide, y es que es casi imposible negarle algo, no despues de conocerlo.
Cuando me toca cuidar a toda la tropa, Miki mi hijo, mi sobrino Alan y Héctor, totalmente es un aliado, me ayuda a cuidar a los otros dos, que por separado no dan problemas... pero juntos ayy wey... tampoco dan pero si son un desmadre...
Quiza nadie lo sabe, pero esa es la razón por la cual cuando se suben los tres al carro, Héctor siempre va en el asiento del copiloto, porque se lo ha ganado, porque lo admiro, ese lugar esta reservado para el, ya es desicion propia si lo cede a alguno de los pequeños.
Tuesday, July 04, 2006
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